Definir la propuesta de valor es tener claro el propósito y esencia de tu marca, lo que al final de cuentas te distingue del resto en el mercado. Nosotros le llamamos TU GRAN PROMESA.
Esta gran promesa parte siempre de un propósito. Como personas, todos tenemos uno en la vida, una meta que incluye lo que nos rodea y a quienes nos rodea, el propósito por el cuál existimos. Esto tu marca también debe tenerlo.
Tener un propósito hace que la vida de las personas esté más enfocada, que sepan hacía dónde alinear cada paso, y proporcionar un sentido.
En una marca, un propósito es la razón de existir más allá de la generación de ingresos de un negocio. Este propósito nosotros lo encontramos al desarrollar TU GRAN PROMESA.
Una gran promesa es aquello con lo que las marcas, a través de sus productos o servicios, se enfoca en mejorar y enriquecer la vida de quien las consume.
No conocerla puede ser contraproducente, ya que puedes generar una idea equivocada sobre los beneficios que la marca ofrece a tus clientes, incluso mucho más profundo que una simple compra de un bien o servicio.
Por ello, es importantísimo que conozcas bien a tus clientes, saber que buscan, que les gusta, que les molesta, que les llena. Así, tu oferta podrá coincidir, además de con su necesidad, con su propósito. Y si logras empatar esto, entonces estarás haciendo la mejor oferta para ellos.
Ahora bien, trata siempre de ser muy claro y directo en el mensaje que quieres trasmitir, no estés disperso o inseguro en lo que tu marca busca proyectar, así tus clientes potenciales notarán que hay congruencia entre lo que eres, con lo que dices.
¿Una propuesta de valor es lo mismo que un mensaje de campaña? No, es mucho más profundo. Una gran promesa tiene que ver con tu comunicación, tu contenido, con todo lo que ofreces. TODO.
Una marca sin propuesta de valor puede confundir a su público, y esto puede pasarle a tu marca si no le das la importancia de generar una GRAN PROMESA.
Si aún tienes dudas acerca de cuál es la gran promesa de tu marca, hazte las siguientes preguntas:
· ¿Cuál es tu diferenciador?
· ¿Cómo vas a transformar la vida de quién te consume?
· En realidad, ¿qué es aquello que hace que tu marca viva más allá de la generación de ingresos?
Cuando resuelvas estas cuestiones, podrás empezar a construir el resto de los pilares de comunicación de tu marca.
Recuerda, tu marca es el activo más grande que tiene tu empresa, así que es muy importante pensar en ella como algo de mucho valor.
De la misma manera que tú eres un ser único en tus pensamientos, emociones y sentir, así tienes que darle vida y propósito a tu marca. “Las buenas marcas no nacen, se hacen”.
En Levels Marketing queremos ayudarte a definir la propuesta de valor de tu marca. Escríbenos, da clic aquí 📲👉 https://www.levels.mx/aplica